dissabte, 19 de juliol del 2008

LA CIUDAD LIBRE DE CRACOVIA/REPÚBLICA DE CRACOVIA













A finales del Siglo XVIII, Cracovia pasó a formar parte de la provincia de la Galitzia austriaca, incorporándose a esta corona que ya, con anterioridad, había participado en el reparto de Polonia junto con Rusia y Prusia. En el año 1794 se inició una revolución en la ciudad (llamada insurrección Kosciuszko, por quien estaba dirigida), que fue aplastada por el ejercito prusiano, aliado de Austria, el cual saqueó el tesoro real de la ciudad.
La situación siguió igual hasta el año 1809, en que Napoleón estableció el Ducado de Varsovia como estado independiente, aunque nación títere de los intereses franceses, el cual incluía el territorio de Cracovia en sus limites.
Tras la derrota de Napoleón ante las potencias europeas, se celebró el Congreso de Viena (1815), para trazar el nuevo mapa de Europa, entre otras cosas. Dicho Congreso dio luz verde a la creación de la Ciudad Libre de Cracovia (también llamada República de Cracovia), a la vez que reestablecía la partición de Polonia entre Austria, Prusia y Rusia.
Al nuevo estado se le impuso la neutralidad y que su política exterior estuviera dirigida por las potencias que lo crearon (Austria, Prusia y Rusia). Así el 18 de octubre de 1815 nacía un nuevo estado en Europa, y esa fecha quedo fijada como su Fiesta Nacional. La extensión territorial de la Ciudad Libre era de poco más de 1200 Km2, que fueron desgajados del antiguo Ducado de Varsovia creado por Napoleón I, y sus fronteras lindaban, como no, con el imperio austriaco, el reino de Prusia y el imperio de los zares.
Las tres potencias garantes dotaron al país de una constitución a la medida de sus propios intereses, en la cual se estableció un sufragio restringido para la elección de sus representantes al Senado y a la Cámara de Representantes. Ejercían el derecho a sufragio: profesores de universidad, maestros, artistas, clero secular, directores de fábricas y talleres, y comerciantes y propietarios importantes (que al menos, de contribución, pagaran 50 zlotys). A los candidatos a ambas cámaras se les exigían estudios universitarios (cursados en universidades polacas); dicha exigencia no se aplicaba a los antiguos funcionarios del Ducado de Varsovia ni a los miembros que eran designados directamente por Austria, Rusia y Prusia.
En el año 1846 estalló una rebelión en la ciudad de Cracovia de tintes nacionalistas. Como dicha rebelión se extendió a otros territorios de la Galitzia, llevo a Austria a intervenir militarmente para sofocarla. Tras la victoria de las tropas imperiales, Austria creó el Gran Ducado de Varsovia, incluyendo en él a Cracovia e incorporando el territorio a su provincia de Galitzia, con lo cual desaparecía como estado independiente la breve ciudad libre de Cracovia.
Tras la derrota austriaca en la guerra austro-prusiana (1866), y de la mano del emperador Francisco José I, se concedió a la ciudad un gobierno municipal y a toda la provincia de Galitzia una cierta autonomía, permitiendo el uso del polaco en el gobierno autónomo y la creación de una dieta provincial. Al ser el imperio austriaco más benevolente con las regiones polacas que sus vecinos prusianos y rusos, Cracovia se convirtió en un importante centro cultural y símbolo nacional polaco.
Durante la Primera Guerra Mundial, los habitantes de Cracovia lucharon junto a Austria y Alemania contra Rusia, ya que las primeras dieron esperanzas a los polacos de crear un estado independiente en los territorios polacos ocupados por los rusos. Tras la Guerra (1918), y con la derrota de Austria-Hungría, el Tratado de Versalles creo una Polonia independiente tras más de un siglo de inexistencia de la nación polaca, en territorios que habían pertenecido a Austria (Galitzia), Rusia y Alemania.

NOTA: Primera imagen: Grabado de Cracovia en el siglo XVIII. Abajo a la izquierda: imagen de Cracovia en 1493. Abajo a la derecha: mapa de la Ciudad Libre de Cracovia, tras su creación.

dissabte, 12 de juliol del 2008

KRONEN/KORONA DE AUSTRIA-HUNGRÍA



























En el año 1892 el Banco Central Austro-Húngaro sustituyó el antiguo Gulden/Forint por las Coronas (Kronen en Austria y Korona en Hungría), como parte de la adopción al patrón oro llevada a cabo por el secretario de finanzas imperial Sánder Werhele. Esta unidad monetaria fue la vigente hasta la disolución del imperio, tras la guerra, en el año 1918.

El valor que se le adjudico fue el de 2 coronas equivalían a un florín; ambas monedas coexistieron durante unos años, hasta el 1900 en que sólo tuvo valor la corona.

Es de destacar que esta nueva unidad monetaria, no sólo adopto los nombres en alemán y húngaro, sino que también adoptó nombre en cada uno de los idiomas que se hablaban en el multinacional imperio:

Österreichisch-ungarische Krone (en alemán) (en alemán)
osztrák-magyar korona (en húngaro) (en húngaro)
corona Austro-Hungarica (en latín) (en latín)
Rakousko-uherská koruna (en checo) (en checo)
korona austro-węgierska (en polaco) (en polaco)
корона (en ucraniano) (en ucraniano)
corona austro-ungarica (en italiano) (en italiano)
krona (en esloveno) (en esloveno)
kruna (en croata) (en croata)
круна (en servio) (en servio)
coroană (en rumano) (en rumano)

Durante la Primera Guerra Mundial, la moneda sufrió una gran devaluación y no sólo por la guerra en si misma, sino por la política seguida por el gobierno que consistió en imprimir tanto papel moneda como dinero necesitaba para sus gastos, logrando la mayor inflación de todos los países combatientes.

Tras la Guerra, y con la aparición de nuevos estados herederos de los territorios imperiales, la corona continuó circulando por esos territorios, aunque cada estado se dedicó a estampillar los billetes para convertirlos en "moneda nacional". El primero en adoptar el método del estampillado fue el nuevo reino de los Servios, Croatas y Eslovenos (que luego sería Yugoslavia), en enero de 1919; le seguiría Checoslovaquia en febrero de 1919 y la propia Austria en marzo de ese mismo año.

La gran inflación tras la guerra, en Austria, conllevo a un aumento de precios sin precedentes históricos, y es que en agosto de 1922 los precios al consumo era 14.000 veces superiores a los de antes de la guerra.

El 2 de enero de 1922 empezó a operar el ÖSTERREICHISCHE NATIONALBANK en Austria, para sustituir al antiguo Banco Central Austro-Húngaro que ya había entrado en proceso de liquidación. El 20 de diciembre de 1923 Austria adopta como nueva moneda el Chelín (10.000 coronas equivalen a un chelín). Hungría también sustituyo la corona por el Pengó el 24 de enero de 1927 (12.500 coronas equivalen a un pengó). En el reino de los servios, croatas y eslovenos, se sustituye en 1920 la corona por el dinar (1 dinar equivalen a 4 coronas).

NOTAS: arriba, billete de la parte austriaca con el estampillado tras la guerra (Deutschosterreich), para limitarlo al territorio de la república de Austria. La imagen central muestra un billete de 100 coronas de la mitad austríaca y la imagen inferior una moneda de igual valor de la mitad húngara

Agradecimientos: a Dot, por su colaboración en la creación de esta entrada.

dimarts, 8 de juliol del 2008

GULDEN/FORINT AUSTRO-HÚNGAROS


En el Imperio Austro-Húngaro, las finanzas eran únicas en todo el territorio imperial, sin que existiera dualidad entre ambas mitades del territorio.

El Banco Central Austro-Húngaro era el encargado de emitir tanto las monedas como los billetes (papel moneda) de curso legal. Desde 1754 (aún imperio austríaco) hasta 1892 (ya en vigor la monarquía dual) la unidad monetaria era el denominado Gulden en la parte austriaca : "Gulden de Österreichish-Ungarische", o Forint en la parte húngara : "Forint dez Osztrák-Magyar",(también era denominado, en determinados momentos, en su nombre latino: florint). Esta denominación, como ya hemos apuntado, perduró hasta 1892, en que fue sustituido por la Corona/Korona.

El Gulden/Forint se subdividía en los denominados Kreuzer/Krajczár, y hasta el año 1857 un Gulden/Forint equivalía a 60 Kreuzer/Krajczár, fecha en que se introdujo la equivalencia de 1/100 en lugar del 1/60.

El estándar de valor del Gulden/Forint era de 2/3 de plata. Los Kreuzer/Krajczár era de cobre. Durante las guerras contra el imperio otomano y el napoleónico, la moneda llego a devaluarse hasta el extremo de que 12 Gulden/Forint equivalían a un estándar de 6 Gulden/Forint plata. Después de 1814, con la victoria de las potencias europeas frente a Napoleón, la moneda volvió a su anterior paridad.

Austria adoptó el nombre de Gulden para la moneda, porque con esta denominación circulaba una unidad monetaria importante en toda la Alemania Meridional. Hungría adoptó el nombre de Forint de la ciudad de Florencia, donde circularon los primeros florines.


NOTAS: de derecha a izquierda: forint húngaro y gulden austriaco.

Agradecimientos a Dot por su labor de investigación para este artículo.